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International

Una mujer en esta profesión también debe ser capaz de extender los codos

Desde el año pasado, los participantes en la formación y los visitantes se reúnen con la joven técnica de aplicaciones Tina Bönisch en la sede de nuestra empresa en Alemania.

Tina Bönisch, maestra pintora de vehículos de 25 años, ha ido abriéndose paso en el mundo de la pintura, dominado por los hombres. A pesar de los retos a los que se ha enfrentado, Tina ha conseguido hacerse rápidamente un nombre en su profesión y se ha convertido en una inspiración para los más jóvenes. Tras trabajar como técnica de aplicación en un proveedor de equipos para talleres, Tina ha podido mostrar sus habilidades y demostrar que el género no es una barrera para el éxito.

La trayectoria de Tina en el sector comenzó cuando le ofrecieron unas prácticas en un taller de pintura a los 18 años. Antes había hecho varias prácticas en distintos campos, pero no le inspiraban demasiado. Fue durante su estancia en el taller cuando Tina descubrió su pasión por la pintura y decidió dedicarse a ello. Dejó en suspenso sus estudios de formación profesional y empezó a formarse como pintora de vehículos.

Durante su formación, Tina tuvo la oportunidad de adquirir experiencia práctica en la reparación de accidentes, así como en la restauración de coches clásicos. Se considera afortunada de haber tenido una gran empresa de formación que le proporcionó los conocimientos y habilidades necesarios. La dedicación y el trabajo duro de Tina se tradujeron en unas notas excelentes, que le allanaron el camino para asistir a la escuela de maestría.

El éxito de Tina en su profesión no se debe únicamente a su talento y trabajo duro. Destaca la importancia de saber imponerse en un sector dominado por los hombres. Tina cree que las mujeres de su profesión tienen que ser capaces de extender los codos, tanto en sentido figurado como literal. Esto significa ser asertivas, tener confianza en sí mismas y no permitir que los prejuicios sexistas obstaculicen su progreso.

Con sus presentaciones y participaciones en ferias, Tina quiere inspirar y motivar a los jóvenes, sobre todo a las chicas, para que se planteen dedicarse a la pintura. Demuestra que el sexo de una persona no debe limitar sus opciones ni su potencial de éxito. Al compartir sus propias experiencias y derribar barreras, Tina sirve de modelo y anima a otros a perseguir sus pasiones, independientemente de las expectativas o estereotipos sociales.